martes, 6 de julio de 2010

PRI Perdió PAN -PRD Ganan Elecciones

La Columna…


Por: Juan Manuel Mejía

Las alianza opositora al PRI funcionó: obtuvo tres gubernaturas (Sinaloa, Oaxaca y Puebla), con lo que el tricolor dejará de gobernar a 11 millones 498 mil 396 mexicanos que representan la suma de la población de esas tres entidades, las cuales se encuentran entre las cinco más importantes disputadas este 4 de julio.
Población en los doce estados que renovaron gobernador:

Estado Población
Veracruz 7,110,214
Puebla 5,383,133
Sinaloa 2,608,442
Oaxaca 3,506,821
Chihuahua 3,241,444
Tamaulipas 3,024,238
Hidalgo 2,345,514
Durango 1,509,117
Zacatecas 1,367,692
Quintana Roo 1,135,309
Tlaxcala 1,068,207
Aguascalientes 1,065,416

Si bien el PRI arrebató al PAN los estados de Aguascalientes y Tlaxcala y al PRD Zacatecas, la suma de la población de esas tres entidades es apenas de 3 millones 501 mil 315 personas; es decir, la tercera parte de lo que le fue arrebatado al tricolor. La diferencia entre lo ganado y lo perdido, deja un saldo en contra del tricolor de 7,997,081 gobernados menos.
En los estados de Durango, Veracruz e Hidalgo la pelea fue muy cerrada, y este es otro indicio más de la efectividad de los acuerdos celebrados entre los panistas y la izquierda.
Para los priístas ufanarse de haber ganado 9 de las 12 gubernaturas, cuando en realidad se ha perdido terreno electoral, resulta pernicioso; un autoengaño.
Los resultados del 4 de julio complican el camino de gobernador en su carrera hacia el 2012 y el proceso de sucesión gubernamental estatal; el priísmo está ahora fuera de su zona de confort; se han encendido los focos rojos. Así lo dejan ver expresiones recientes como las del diputado Enrique Jacob Rocha.
Para Peña Nieto, las derrotas en esos estados se suman a una serie de factores que igualmente operarán en su contra: el factor Montiel, el caso Paulette, el caso Atenco…
La suma de estos elementos constituyen un coctel peligroso, pues se debe hacer notar que dos de las derrotas priístas en entidades importantes como Puebla y Oaxaca tuvieron mucho que ver con el desgaste de imagen de sus gobernantes.
Los resultados del 4 de julio también dejan en claro que el llamado efecto Peña es ilusorio, pues en Oaxaca y Puebla se perdió, no obstante a haber recibido apoyo moral y presencial del mandatario.
Ahora veremos más seguido por aquí a Manuel Camacho Solís, cabildeando y diseñando el plan para de alianza para enfrentar al priísmo del Estado de México, pero antes deberá enfrentar a esos esquiroles cuya existencia reconoce la dirigencia estatal perredista.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Buscar este blog

Etiquetas

Powered By Blogger

casas de cartón

Sentimientos de hoy y siempre

El Mundo Está Cambiando

Seguidores