Casa del Migrante de Tultitlán Cumplió Años

Por: Arturo Hernàndez

Mejores y más Acciones Para Proteger Migrantes Pide la Iglesia

Tultitlán. Mèx.- Desde el 2007 la Iglesia denunció el constante secuestro de migrantes; denuncia que se le puso atención sólo cuando fueron raptados y asesinados 70 ilegales en Tamaulipas y otros en Chiapas, dijo Leticia Gutiérrez Valdemar, secretaria ejecutiva de Dimensión Pastoral de Movilidad Humana del Consejo del Episcopado Mexicano
Al participar en el segundo aniversario de fundación de la Casa del Migrante “San Juan Diego”, ubicada en el número 15 de la calle Cerrada de la Cruz, colonia Lechería, este miércoles la Diócesis de Cuautitlán organizó una ceremonia religiosa y una comida para cerca de cien migrantes indocumentados.
La colonia Lechería es el punto de partida de más de diez mil migrantes que cada año cruzan por la zona rumbo a la frontera norte de México con los Estados Unidos, aquí en enero del 2009 se fundo la primera Casa del Migrante única que existe entre la ruta de Veracruz al estado de México.
Ésta –Lechería- es una zona que tiene sus propias problemas en torno al crimen organizado que viven los y las migrantes aquí, desde el secuestro, el robo, el abuso de la policía, de ferrocarrileros”, dijo Gutiérrez Valdemar, al señalar que el problema de la migración no ha tenido la respuesta oficial necesaria.
Gutiérrez Valdemar, dijo que Lechería es un punto importante porque de aquí los migrantes deciden que ruta tomarán para llegar a los Estados Unidos, “lo viven en el sur lo viven aquí en el centro, la delincuencia se ha permeado en todo el país y en ese fenómeno un grupo vulnerable son los migrantes”.
En el Estado de México durante dos años han raptado a 70 migrantes y muerto 14 debido a “levantones”, secuestros o accidentes, afirmaron integrantes de La Pastoral de Movilidad Humana del Consejo del Episcopado Mexicano, quienes junto con sacerdotes católicos exigen al gobierno federal y estatales más y mejores acciones para proteger a los peregrinos de paso hacia Estados Unidos.
“El peor error que cometió el gobierno federal fue negar que existían los secuestros y levantamientos de migrantes, y al no reconocer el problema, no hizo nada”, dijo la representante al señalar que el gobierno federal ha sido “permisivo” porque al no abordar soluciones permitió que el problema se agudizara.
Como iglesia católica y mediante el ex secretario de Gobernación, Miguel Ángel Acuña, la federación en su momento fue informada que había secuestros y tuvo que ocurrir la matanza de 72 migrantes en San Fernando, Tamaulipas, para se diera atención al problema.
Pero esa atención es muy pobre, pues el gobierno federal se limitó a pagar un anuncio en la televisión donde se daba un número teléfono para denunciar abusos a migrantes, “y al momento no tenemos más, no hay nada concreto y específico para atender la violenta inseguridad que pesa sobre ese sector”, dijo.
El sacerdote Miguel Álvarez, quien presidió la ceremonia religiosa, hizo un llamado a los “corazones aletargados” que aún permanecen insensibles a este clamor desesperado de migrantes que pasan por el país, en condiciones de inseguridad.
“El servicio al forastero es la expresión concreta de amor según el evangelio, y las fronteras que se crean para dividir naciones, son la expresión más inicua y asquerosa del miedo”, dijo el párroco.