Cuautitlán Izcalli. Aquabiosphera

Cuautitlán Izcalli. Méx. 30 de abril.-La organización ecológica Aquabiosphera acusó al gobierno del estado de México de impulsar una política de exterminio del área natural protegida Santuario del Agua y Forestal Lago de Guadalupe, pues autorizó a empresas inmobiliarias construir ocho desarrollos inmobiliarios en mil 700 hectáreas , con lo cual se terminan terrenos de escurrimientos y que son hábitat natural de fauna y flora silvestre.
Roberto Espinosa, presidente de Aquabiosphera, expuso que el gobierno del estado de México avaló la urbanización de lotes aledaños al Lago de Guadalupe y que las empresas inmobiliarias Frisa y Beta-Homex, impulsan proyectos inmobiliarios en tierras de la reserva ecológica.
Dijo que el Santuario del Agua y Forestal Lago de Guadalupe tiene una superficie de 526 hectáreas y en esas tierras avanzan los proyectos habitacionales denominados: La floresta, Mirabella del Lago, Cantaros 3, Cantaros 4, Villas Turísticas norte, Villas turísticas sur, así como Colonial del Lago, Montesur y 252 hectáreas en Campestre del lago.
De hecho, La floresta, Mirabella del Lago, Cantaros 3 y 4, Colonial del lago y Montesur.
El gobierno estatal por medio del Instituto Mexiquense de la Vivienda Social (Imevis), dijo, pretende regularizar un asentamiento irregular en 27 hectáreas de la zona de Tepojaco y argumenta defender el lago; pero la realidad es que esa es una acción mediática si se considera que la cantidad de tierras del asentamiento irregular, “no son nada en comparación con lo que ya esta depredando Frisa y Beta Homex”.
El ecologista dijo que las autoridades ni fraccionadores respetan la reserva del lago de Guadalupe y urbanizan sustentados en la construcción de dos colectores marginales, que comenzaron a construir desde el año de 1997 y tienen como finalidad captar descargas residuales domiciliarias.
Los desarrollos inmobiliarios avanzan y también la contaminación de la zona lacustre, “afectando poblaciones de fauna y flora del lago que, inclusive, cada año recibe a aves migratorias como gansos canadienses, garzas y pelícanos que vienen de Estados Unidos y Canadá”, comentó el dirigente ecologista.